Hace un año decidimos dar un paso más en la organización de la distribución de los alimentos.
No como una mera expresión emprendedora o gesta solidaria, sino como una necesidad colectiva de hacernos cargo: construir caminos, relaciones y redes con el propósito de avanzar en la soberanía del pueblo.
De esta manera establecimos la soberanía alimentaria como un punto desde el cual empezar a construir y también un horizonte al que llegar. Para ello, pensamos en organizarnos e integrarnos los trabajadores de todos los sectores en pos de construir la comunidad que queremos, con nuevas relaciones sociales y valores, donde ya no nos pensemos desde las mercancías que podamos intercambiar, sino desde las necesidades que queremos y podemos resolver.
Hoy nos encontramos y nos desafiamos a seguir trabajando juntos, cada vecino, asociado, productor, trabajador organizado, todos los que construimos día a día está comunidad.